Josep María Romaguera i Bach. Diócesis de Barcelona
Este tercer domingo de cuaresma se nos plantea, en el Evangelio, que con la venida del Hijo al mundo, Dios da a cada persona una nueva oportunidad de convertirse. Vale la pena tomar nota: podemos volver a empezar.
Josep María Romaguera i Bach. Diócesis de Barcelona
Josep María Romaguera i Bach. Diócesis de Barcelona
La Palabra de Dios de este domingo nos sitúa en la humildad de reconocer que las cualidades y virtudes, propias y de los demás, son don de Dios. Y la humildad de reconocer que de los defectos que vemos en los demás también somos partícipes.
Josep María Romaguera i Bach. Diócesis de Barcelona
Josep María Romaguera i Bach. Diócesis de Barcelona
El evangelio nos regala este domingo el relato de las bienaventuranzas. Con la contraposición entre las bienaventuranzas y las amenazas, Lucas presenta el Reino de Dios como la inversión de la situación actual: Dios opta por darse, por dar su Reino, a quienes ahora y aquí se encuentran en necesidad. Es una opción que no justifica de ninguna manera esta situación injusta: por eso aparecen enseguida y en paralelo las amenazas a los “ricos, saciados...”. Se trata de invertirlo ahora y aquí.