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Josep María Romaguera Bach. Diócesis de Barcelona

El próximo domingo, parábola de la vid y los sarmientos. “El fruto” que los discípulos podemos dar no depende sólo de nosotros. La acción de los cristianos, la transformación del mundo que pretendemos, no depende de la técnica con qué podamos actuar, ni de las estrategias, ni –en absoluto– de los medios económicos o del poder que podamos tener en el mundo. Los “verdaderos” “frutos” serán los que resulten de nuestra unión con Jesús, de nuestra atención a su persona, de nuestra apertura a la acción de su Espíritu que nos envía a los más pobres, a los que no tienen ningún poder ni siquiera los medios para vivir con un mínimo de dignidad.

Pauta para el Estudio de Evangelio personal o compartido en grupo

1. Oración para pedir el don de comprender el Evangelio y poder conocer y amar a Jesucristo y, de este modo, poder seguirle mejor y darlo a conocer

2. Anoto algunos hechos vividos esta última semana

3. Leo/leemos el texto. Después contemplo y subrayo

4. Anoto lo que descubro de JESÚS y de los demás personajes, la BUENA NOTICIA que escucho... Me planteo mi relación con Jesús, como escucho su Palabra y le soy fiel. Y me pregunto si a través de la unión con Él vivo la unión con los demás discípulos, con la Iglesia.

5. Desde el evangelio, vuelvo a mirar la vida, los HECHOS vividos, las PERSONAS de mi alrededor... Contemplo la acción de los cristianos que conozco. Y los frutos que dan respondiendo a la voluntad del Padre.

6. Llamadas que me hace –que nos hace– el Padre hoy a través de este Evangelio y compromiso(s)

7. Oración. Diálogo con Jesús dando gracias, pidiendo...

 

Notas por si hacen falta

 Notas sobre la imagen bíblica de la viña

 

  • En la tradición bíblica, la imagen de la viña es aplicada al pueblo de Israel, el Pueblo que Dios ha plantado y del cual se esperan buenas uvas. Esto lo encontramos especialmente en Is 5,1-7. Pero hay otros lugares en el AT que usan esta imagen (Is 3,14; 27,2-5; Jr 2,21; Os 10,1; Sl 80[79],9-20). El Nuevo Testamento recoge esta tradición, especialmente los evangelios sinópticos (Mt 20,1-15; 21,33-46; Mc 12,1-12; Lc 20,9-19).
  • El evangelio de Juan también se hace eco de esta tradición bíblica. Pero Jn, a partir de lo que esta imagen ya decía por si misma a los oyentes-lectores judíos, da nuevos pasos y le hace decir más.
  • Como el pasado domingo con la imagen del buen pastor (Jn 10,11-18), hoy encontramos un texto en el que Jn nos dice que Jesús habla de si mismo con esta fórmula del “yo soy” (1). Otros lugares de Jn en qué está esta fórmula de auto-revelación son: el pan de vida (Jn 6,35), la luz del mundo (Jn 8,12), la puerta (Jn 10,7), el pastor (Jn 10,11), la resurrección y la vida (Jn 11,25) y el camino, la verdad y la vida (Jn 14,6). Detrás de esta expresión está la experiencia del Éxodo (Ex 3,1-22): Dios se da a conocer a su pueblo con la acción liberadora, generando el paso de la esclavitud a la libertad; el nombre, yo soy el que soy (Ex 3,14), quiere expresar esta identidad del Dios que actúa liberando.

 Notas para fijarnos en Jesús y el Evangelio

Leer más: DOMINGO V DEL TIEMPO DE PASCUA -CICLO B - 2024
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Josep María Romaguera Bach. Diócesis de Barcelona

El próximo domingo es el del "Buen Pastor", expresión que puede confundir. Jesús es el Dios liberador, comprometido con los oprimidos. Este es el Dios "bueno", el Dios que libera de veras.

Pauta para el Estudio de Evangelio personal o compartido en grupo

1. Oración para pedir el don de comprender el Evangelio y poder conocer y amar a Jesucristo y, de este modo, poder seguirle mejor y darlo a conocer

2. Anoto algunos hechos vividos esta última semana

3. Leo/leemos el texto. Después contemplo y subrayo

4. Anoto lo que descubro de JESÚS y de los demás personajes, la BUENA NOTICIA que escucho...La fe que hemos renovado en la vigilia pascual, ¿me ha llevado a renovar, efectivamente, los compromisos que derivan de ella: dar la vida por los demás, conocer–amar a Dios y a los demás, trabajar por la “reunión de los hijos de Dios dispersos”...?

5. Desde el evangelio, vuelvo a mirar la vida, los HECHOS vividos, las PERSONAS de mi alrededor...¿A quien he visto que da la vida por los demás, a la manera de Jesús?

6. Llamadas que me hace –que nos hace– el Padre hoy a través de este Evangelio y compromiso(s)

7. Oración. Diálogo con Jesús dando gracias, pidiendo...

Notas por si hacen falta

Notas para situar el texto en el conjunto de la Biblia

 

  • El evangelista Juan pone muchas veces en boca de Jesús el yo soy: yo soy el pan de vida (Jn 6,35), yo soy la luz del mundo (Jn 8,12), yo soy la puerta (Jn 10,7), yo soy el pastor (Jn 10,11), yo soy la resurrección y la vida (Jn 11,25), yo soy el camino, la verdad y la vida (Jn 14,6), yo soy la vid (Jn 15,1) ... Esta expresión evoca la experiencia del Éxodo (Ex 3,1-22): Dios se da a conocer a su pueblo con la acción liberadora, generando el paso de la esclavitud a la libertad; el nombre, yo soy el que soy (Ex 3,14) quiere expresar esta identidad del Dios que actúa liberando.
  • El evangelista, por lo tanto, identifica a Jesús con el Dios de la liberación. De este modo, la imagen del “pastor” (11.14) que encontramos en este pasaje, precedida del “yo soy”, tiene que entenderse, en primer lugar, desde esta clave: un “pastor” que libera.
  • La imagen del “pastor” ya había sido utilizada muchas veces en la Biblia (Is 40,11; Ez 34,15; 37,24; Sl 23,1; Sir 18,13; Hb 13,20; Ap 7,17; Mc 10,45). El “pastor” es el que cuida de las ovejas y las conduce a praderas en las que puedan comer y tengan vida.
Leer más: CUARTO DOMINGO DE PASCUA (DOMINGO DEL BUEN PASTOR) - CICLO B 2024
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Josep María Romaguera Bach. Diócesis de Barcelona

En el Evangelio del próximo domingo vemos como Lucas se esfuerza en responder a la mentalidad que considera a Jesús resucitado como un puro "espíritu", un “fantasma” (véase también Mt 14,26; Mc 6,49). Por eso subraya con fuerza la experiencia que tuvieron los apóstoles: quien se les presenta, el Resucitado, es el mismo de antes, el Crucificado.

Pauta para el Estudio de Evangelio personal o compartido en grupo: Evangelio según Lucas, 24,35‑48

1.Oración para pedir el don de comprender el Evangelio y poder conocer y amar a Jesucristo y, de este modo, poder seguirle mejor y darlo a conocer        

2. Anoto algunos hechos vividos esta última semana

3. Leo/leemos el texto. Después contemplo y subrayo

4. Anoto lo que descubro de JESÚS y de los demás personajes, la BUENA NOTICIA que escucho...¿Qué experiencia vivida tengo de haber acogido a Cristo en la comunidad reunida? ¿Soy consciente de que he sido constituido testigo de su voluntad de reconciliación, de reunir a “todos los pueblos”?

5. Desde el evangelio, vuelvo a mirar la vida, los HECHOS vividos, las PERSONAS de mi alrededor... ¿Cómo y a través de quién he recibido la paz y la alegría del Resucitado?

6. Llamadas que me hace –que nos hace– el Padre hoy a través de este Evangelio y compromiso(s)

7. Oración. Diálogo con Jesús dando gracias, pidiendo...

 Notas por si hacen falta

Notas sobre el texto y su contexto

 

  • Esta página del evangelio que encontramos hoy es la continuación del relato de los discípulos de Emaús (Lc 24,13-35). Puede ir bien leer los dos textos seguidos.
  • Aquí, como en el relato del camino de Emaús, el evangelista pone mucho énfasis en el cumplimiento de lo que dicen las Escrituras. “Ley, Profetas y Salmos” (44) significa todo el Antiguo Testamento. La expresión alude a las tres partes en qué se divide la Escritura para los judíos: Pentateuco («Ley»), Profetas y Escritos.

 

Notas para fijarnos en Jesús y el Evangelio

Leer más: DOMINGO III DE PASCUA - CICLO B 2024
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Josep María Romaguera Bach. Diócesis de Barcelona

El próximo domingo encontramos el bonito relato de lo que sucedió los dos primeros Domingos de la vida de la Iglesia. La Iglesia reunida, la paz, el perdón, la misión... todo arranca de la Pascua. Será el don del Espíritu quien lo active.
¡Que vaya bien!
¡Feliz Pascua!

Pauta para el Estudio de Evangelio personal o compartido en grupo

1. Oración para pedir el don de comprender el Evangelio y poder conocer y amar a Jesucristo y, de este modo, poder seguirle mejor y darlo a conocer

2. Anoto algunos hechos vividos esta última semana

3. Leo/leemos el texto. Después contemplo y subrayo

4. Anoto lo que descubro de JESÚS y de los demás personajes, la BUENA NOTICIA que escucho... Pensando en la parroquia, comunidad o movimiento, me pregunto cómo el Resucitado nos da a nosotros lo mismo que vemos que da a los discípulos reunidos.

5. Desde el evangelio, vuelvo a mirar la vida, los HECHOS vividos, las PERSONAS de mi alrededor... Y me fijo en como, a pesar de las puertas cerradas que pueda haber, Cristo Resucitado se ha hecho presente en medio de personas y situaciones.

6. Llamadas que me hace –que nos hace– el Padre hoy a través de este Evangelio y compromiso(s)

7. Oración. Diálogo con Jesús dando gracias, pidiendo...

 

Notas por si hacen falta

 

Notas sobre el contexto de Jn y sobre el concepto “los judíos”

 

  • Hay que tener presente que en el evangelio de Juan la expresión “los judíos” (19) no designa al pueblo de Israel como tal, sino a los dirigentes religiosos del pueblo de un determinado momento histórico.
  • También hay que tener en cuenta que la comunidad a la que va destinado el evangelio de Juan había vivido la experiencia de la ruptura total que habían provocado los fariseos –grupo que dominaba al judaísmo desde el año 70 dC–, quienes habían acordado expulsar de la sinagoga a todo aquel que confesase que Jesús era el Mesías (Jn 9,22).
Leer más: DOMINGO II DE PASCUA -CICLO B. 2024
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Josep María Romaguera Bach. Diócesis de Barcelona

Pauta para el Estudio de Evangelio personal o compartido en grupo

1-2-3. Estos tres primeros pasos como en EV anteriores

4. Anoto lo que descubro de JESÚS y de los demás personajes, la BUENA NOTICIA que escucho... María, Pedro y el otro discípulo “corren” para saber qué ha pasado y para “ver” a Jesús. Los contemplo y dejo que se me contagien sus ganas de “ver” a Jesús y de vivir con Él.

5. Desde el evangelio, vuelvo a mirar la vida, los HECHOS vividos, las PERSONAS de mi alrededor...Dejemos que este texto nos cuestione sobre la Revisión de Vida: ¿Hacemos bien el “ver”? ¿Lo iluminamos bien con el concurso de todos los compañeros/as (2) y de la Palabra de Dios (9)? La práctica de la RdV, ¿me ayuda personalmente a hacer experiencia de “ver” (8) al Señor en la vida, en las personas y en los acontecimientos?

6. Llamadas que me hace –que nos hace– el Padre hoy a través de este Evangelio y compromiso(s)

7. Oración. Diálogo con Jesús dando gracias, pidiendo...

 

Notas por si hacen falta

 

Notas sobre el texto y algunos símbolos

 

  • Este evangelio nos presenta dos escenas: la primera (1-2), con “María Magdalena” como protagonista, conduce a la segunda (3-9), con “Simón Pedro” y “el otro discípulo”.
  • En la primera se destaca que estamos en “el primer día de la semana” (1), el domingo. Esta expresión sugiere comienzo, nueva creación: Al principio, Dios creó el cielo y la tierra... (Gn 1,1).
  • També se destaca que era “antes de salir el sol” (1), es decir, simbólicamente, que todavía no brilla la luz de la fe.

 

Notas para fijarnos en Jesús y el Evangelio

 

  • María Magdalena “vio la piedra quitada” (1) e intuye alguna novedad. Con sólo este “ver”, “echó a correr” (2) para avisar a “Simón Pedro y al otro discípulo” (2). María quiere encontrar al Señor.
  • Sobre “el otro discípulo” (2), dice el texto que es el “a quien Jesús amaba” (2). En Jn 13,23 se habla por primera vez del discípulo “a quien Jesús amaba”. Otros lugares donde se habla de él son Jn 19,25-27 y Jn 21,7.20-24. Es probable que sea la misma persona designada como el otro discípulo en el relato de la pasión (Jn 18,15-16). No se dice en ningún momento que sea uno de los Doce. Es claro que se trata de una figura importante del evangelio y que es presentado como modelo de discípulo de Jesús. El capítulo 21 de Jn, que es un apéndice añadido (se nota que está escrito por una mano diferente al conjunto de la obra), lo presenta como el autor del evangelio (Jn 21,24).
  • En esta escena hay un contraste entre Pedro y este “discípulo amado”. Pero el texto respeta los datos de la tradición cristiana primitiva, que recuerda a Pedro como el primero de los testigos de la resurrección, y no se posiciona por ninguno de los dos, sino que pone en un lugar de privilegio a una mujer: “María Magdalena” (Jn 20,11-18).
  • Hay diversas mujeres que tienen un lugar destacado en el evangelio según Juan: la madre de Jesús, al comienzo de la actividad de él (Jn 2,1-12) y al pie de la cruz (Jn 19,25-27); la samaritana (Jn 4); Marta y María (Jn 11); y María Magdalena (Jn 19,25; 20,1-18).
  • En la segunda escena, los dos discípulos, motivados por el aviso de María, salen “corriendo” (3-4). También quieren “ver” qué ha sucedido.
  • Pedro y el otro discípulo “vieron” (5-6) los mismos signos de la resurrección de Lázaro (Jn 11,44). La diferencia está en que allí Lázaro sale atado, es decir, retorna a la vida para morir; en cambio aquí “los lienzos” están “por el suelo” (6), lo cual significa que Jesús se ha desatado de las ataduras de la muerte.
  • No han visto a Jesús ni María ni Simón Pedro ni el otro discípulo. Ven el sepulcro vacío. En este mismo momento, uno de ellos, “el otro discípulo” (8) “vio y creyó”. Son los ojos de la fe, y la luz de la Palabra de Dios (9) los que permiten “ver” la resurrección de Jesús en el sepulcro vacío. María se acerca con amor, pero todavía no había “salido el sol”. Más adelante podrá decir que lo ha visto (Jn 20,18), como también los apóstoles: hemos visto al Señor (Jn 20,25).
  • “Jesús tenía que resucitar de entre los muertos” (9). Solamente después de la glorificación de Jesús se puede hablar de creencia. Es una enseñanza compartida por todo el Nuevo Testamento. El evangelio según Juan lo remarca de diversas formas (Jn 12,16; 13,7.19; 14,29; 20,9). Pero, por encima de todo, lo enseña por medio de la promesa del Espíritu (Jn 7,39; 14,16.26; 15,26-27; 16,7-15): tan solo con la venida del Espíritu será posible creer en Jesús, porque sólo entonces se podrá conocer su misterio. Creer y conocer van unidos (Jn 4,42; 6,69; 10,38; 16,30; 17,7-8).
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Pautas para el estudio y reflexión del Evangelio. Josep María Romaguera Bach. Diócesis de Barcelona

El evangelio de la Vigilia Pascual es el del ciclo B: Mc 16, 1-7

 

Pauta para el Estudio de Evangelio personal o compartido en grupo

1. Oración para pedir el don de comprender el Evangelio y poder conocer y amar a Jesucristo y, de este modo, poder seguirle mejor y darlo a conocer

2. Anoto algunos hechos vividos esta última semana

3. Leo/leemos el texto. Después contemplo y subrayo

4. Anoto lo que descubro de JESÚS y de los demás personajes, la BUENA NOTICIA que escucho... Estos días, ¿Qué he descubierto (o estoy descubriendo) sobre la muerte y resurrección del Señor? ¿Qué me supone la renovación de las promesas bautismales?

5. Desde el evangelio, vuelvo a mirar la vida, los HECHOS vividos, las PERSONAS de mi alrededor... En los hechos vividos estos “días santos”, ¿Qué experiencias he hecho de encuentro con el Resucitado? y ¿a través de qué personas? Estas experiencias, ¿Cómo me predisponen a volver a mi “Galilea” en donde puedo “ver” al Señor?

6. Llamadas que me hace –que nos hace– el Padre hoy a través de este Evangelio y compromiso(s)

7. Oración. Diálogo con Jesús dando gracias, pidiendo...

 

Notas por si hacen falta

 Notas sobre el sepulcro vacío y sobre Galilea

 

  • Este relato del “sepulcro vacío”, es común a todos los evangelios. Aunque no pueda probar nada, se convierte en signo de la afirmación de la fe: Cristo ha sido resucitado por el Padre, es decir, no está entre los muertos, no ha quedado atrapado en el lugar de los muertos en el que había sido introducido.
  • “Galilea” es la vida cotidiana, es el lugar y el ambiente concreto en donde cada uno de nosotros vive, ama, es amado, trabaja, lucha... El lugar en donde vivimos la mezcla de vida y muerte, de amor y desamor, de tristeza y alegría, de trabajo y diversión, de lucha y descanso... Es, entonces, el único lugar en el que podemos “ver” al Resucitado, el único lugar a donde somos llamados por Él a seguirle. Y el lugar en el que cada discípulo hará, en nombre de Él, la llamada a nuevos discípulos, haciendo el anuncio del Reino de Dios (Mc 1,1.14-20).

 

Notas para fijarnos en Jesús y el Evangelio

 

  • Las mujeres (1) habían sido presentadas poco antes, en el drama de la pasión, justo cuando se produjo la muerte de Jesús, diciendo que miraban desde lejos (Mc 15,40). De ellas se dice que seguían a Jesús cuando él estaba en Galilea y que lo atendían (Mc 15,41), pero no habían aparecido antes en el relato –sí que lo menciona el evangelista Lucas, por ejemplo (Lc 8,2-3)–. Y se nos dice que ellas observaban dónde ponían el cadáver de Jesús (Mc 15,47).
Leer más: SABADO SANTO - VIGILIA PASCUAL -CICLO B 2024